Javier Andrés Pavón es un melillenses con una discapacidad que le obliga a utilizar una silla de ruedas. Hace unos días conoció la historia de María, una niña que también utiliza una de esas sillas y que siempre desea montarse en los columpios del parque.
Cuando era pequeña su madre la cogía en brazos y se balanceaban juntas. Pero ahora es mayor y no puede cargar con ella. Denunciaron en las redes sociales su caso a través de la plataforma ‘Pinceladas en silla de ruedas’ y la Consejería de Medio Ambiente les ha prometido poner un columpio para minusválidos en el parque Hernández. La Ciudad les ha asegurado que si la iniciativa funciona, se extenderá a otros parques de Melilla.