El menor extranjero no acompañado residente en el centro de La Purísima, de unos 16 o 17 años de edad, que supuestamente apuñaló a un compañero el pasado domingo ya ha pasado a disposición judicial. Así lo aseguró el consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura. Se trata de una reacción a una noticia que publicó El Faro en su edición de ayer y que hablaba de una agresión con objeto punzante en el glúteo y en el costado. Este ataque se saldó con uno de estos jovenes con cinco putos de sutura.
Al igual que hizo el día anterior en declaraciones a este diario, Ventura insistió en que este tipo de actos entre los chicos residentes en el centro son “puntuales” y los achacó a que “como en todas las familias” hay disputas, pero en esta clase de casos, con la carencia en “habilidades sociales y resolución de conflictos” de estos menores extranjeros, reaccionan de “una forma inadecuada”.
El consejero también indicó que los jóvenes acogidos en La Purísima “discuten con cierta regularidad”, pero no siempre se llegan a dar situaciones como las del pasado domingo.
Fuera del centro
Uno de los puntos en los que el titular de Bienestar Social quiso hacer hincapié en sus declaraciones a la prensa de ayer fue en que el conflicto que dejó a un joven herido por un objeto punzante se originó fuera del centro y, una vez dentro, los chicos “intentaron resolverlo pinchando”.
En este sentido, Ventura incidió en que hay personas mayores de edad en las inmediaciones de La Purísima que “intentan aprovecharse de los menores”, lo cual, en palabras del consejero, “genera conflictos”.
“Hay que decir que este tipo de sucesos no son la regla general”, remarcó Ventura, que agregó que lo normal es que “vivan en convivencia con educadores y cuidadores” de las instalaciones.
La sobreocupación del centro no es el porqué de conflictos
Sobre las razones que pudieron llevar a los dos menores extranjeros no acompañados a verse inmersos en una reyerta de la que uno de los dos salió con heridas de arma blanca en el glúteo y el costado, el consejero de Bienestar Social, Daniel Ventura, descarta que este hecho y otros similares se deban exclusivamente a la sobreocupación del centro de La Purísima. “La capacidad del centro está al doble, pero siempre se hace frente a esta situación cubriendo las necesidades básicas”, argumentó el titular de esta área del Gobierno local.
“No es un tema, por tanto, de hacinamiento, que también provoca discusiones, sino que se debe a las relaciones interpersonales” entre los chicos, comentó Ventura, que insistió a que estos jóvenes carecen de habilidades sociales para la resolución de conflictos, lo que puede derivar en cuestiones como las del pasado domingo. Además, ensalzó la labor de los trabajadores del centro.
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