El colegio Real guardó ayer un minuto de silencio por sus tres alumnos fallecidos en Nador l Una compañera leyó una carta de despedida
Un colegio es un lugar bullicioso donde sólo los maestros logran que se guarde silencio. Pero ayer no hizo falta que ninguno de ellos mandara callar. El centro de Primaria Real enmudeció durante un minuto en recuerdo de tres alumnos y su madre, que el domingo perdieron la vida en un incendio en Nador. Dina, Wassim y Wassima recibieron ayer un homenaje de todos sus compañeros del centro escolar, así como de los maestros y decenas de padres que se congregaron a las 9:15 horas para guardar silencio en su recuerdo.
Estos tres niños eran muy queridos por sus compañeros. Una niña que compartía aula con Dina leyó una carta muy emotiva que hizo llorar a muchos pequeños y adultos. “Todavía no nos podemos creer que ya no volveremos a verte jamás. A algunos nos parece como un sueño”, destacó esta pequeña.
Dina: graciosa y divertida
Este escrito resaltó cómo conocían a Dina por su coleta y recordó los buenos momentos que habían pasado con ella jugando en el parque. La definió como una niña divertida y graciosa.
“Te pedimos perdón por las veces que nos pudimos pelear, insultarte o molestarte. Todos en clase te queremos mucho. Hemos llorado mucho por ti, no nos podíamos aguantar”, añadió.
Para terminar esta carta, la compañera de Dina aseguró que nunca la van a olvidar y que si estuviera de nuevo con ellos, la abrazarían con fuerza. “Aunque estés fallecida, serás nuestra amiga del alma con tu alma”, apuntó.
Además, indicó que espera que Dios la cuide y que se lo pase muy bien allá donde esté.
Tras la lectura de este texto, un maestro se acercó a las cuatro sillas que habían dispuesto en el patio y cortó cuatro globos que habían atado a ellas para simbolizar las cuatro personas que fallecieron este incendio en Nador.
“Una gran conmoción”
La directora del centro, María José Belmonte, afirmó que el colegio está “conmocionado” desde que el lunes conocieron esta noticia. “En estos momentos lo único que podemos hacer es ponernos a disposición de la familia y rezar por ellos. Siempre estarán en nuestros corazones”, afirmó.
Belmonte explicó que la madre de los tres pequeños, Hanane, visitaba de vez en cuando el centro para preocuparse de las notas y la evolución de sus hijos. Dina tenía 8 años, Wassim contaba con 7 desde enero y Wassima, 5.
La directora del Real resaltó que el lunes algunos alumnos ya sabían lo que había ocurrido y por ello, las maestras de estos estudiantes trataron el tema de la muerte en sus clases. “Las profesoras tuvieron el arrojo y la valentía de hablar con los niños del tema y de encender velas y hacer cartas para que expresaran su dolor”, destacó.
Belmonte incluso comentó que los compañeros de Wassima le preguntaron a su tutora qué iban a hacer con su sitio y ella respondió que seguiría siendo de esta niña durante un tiempo.
La directora comentó que esta noticia no rompió la rutina del centro, pero sí que afectó a todos los miembros de este colegio. “Hay que ponerse la máscara y tirar para adelante”, aseveró Belmonte.
“Cuatro razones para seguir luchando”
Melilla Acoge también dedicó unas palabras a la familia fallecida en Nador. Aseguró que Hanane, la madre, era una luchadora que había encontrado en sus cuatro hijos, uno de ellos no murió en el incendio, la razón para superar los numerosos obstáculos que encontró en su vida. También indicó esta ONG que vio crecer, aprender y superarse a Hanane y que se había convertido en una parte fundamental de esta gran familia.