La Policía marroquí desmanteló ayer una célula terrorista compuesta por cuatro personas que habían jurado lealtad al líder de la organización Estado Islámico y que pensaban atentar en Casablanca.
El Ministerio de Interior informó en un comunicado de que los miembros de la célula fueron detenidos en Casablanca y en Mogran, a unos 77 kilómetros al norte de Rabat.
El comunicado añadió que los miembros de la célula planeaban ejecutar “operaciones dirigidas contra lugares vitales” en Casablanca, capital económica del país magrebí.
El desmantelamiento de células terroristas y los juicios a sus integrantes son casi semanales en Marruecos. La Oficina Central de Investigaciones Judiciales tiene contabilizados más de 1.500 marroquíes que se han integrado en el EI, sin contar los que se han sumado a otros grupos yihadistas.