El pasado año, por estas mismas fechas, publiqué un capítulo más de esta columna que titulé ‘Despedida del 2023 y bienvenido el 2024’ y en el que escribía que “si el año pasado fue bastante decepcionante no podemos permitirnos el lujo de dejar pasar otro año sin solucionar los problemas que impiden un nuevo desarrollo económico de nuestra Ciudad”. Y finalizaba con un mensaje de optimismo “ojalá este 2024 sea el año de las ilusiones cumplidas y el inicio de un nuevo futuro para Melilla”.
Pues bien ha acabado el año y, lamentablemente, los problemas que nos preocupaban en el 23 siguen existiendo y sin solucionar en el 24. Podría “cortar y pegar” el mismo artículo solo cambiando los dígitos pero como la representante oficial del Gobierno en Melilla no deja de contarnos milongas y haciendo declaraciones de su “buena” gestión me voy a permitir criticarla en muchos de los temas que son competencia del Gobierno y de sus jefes políticos.
La última “boutade” que ha soltado con su sempiterna sonrisa – no sé si burlona o no- es que “va a seguir trabajando en la senda de la mejora”. Me pregunto a qué mejora se refiere. Por ejemplo, después de engañar una y otra la vez sobre la inminente reapertura de la aduana comercial se permite el lujo de enorgullecerse por las famosas “pruebas” realizadas hace ya un año y decirnos que “la aduana ya no puede funcionar como si fuera “de dos ciudades vecinas”, sino la de dos países y que uno de ellos es frontera de la Unión Europea”, como si ello fuese una novedad. Esta señora o es tonta o se lo hace. La aduana comercial en los muchos años que ha estado operativa siempre ha sido entre dos países – no entre dos ciudades vecinas- y en ambos lados se han aplicado la misma legislación y procedimientos aduaneros que se aplican a los tráficos comerciales en el resto de las aduanas de ambos Reinos. Por cierto, la “visita” de la aduana marroquí tanto en las importaciones como las exportaciones se realizaba antes del cierre en las instalaciones del puerto de Nador y, por tanto, no sería ningún cambio en el que se haya estado trabajando “tan ardua y discretamente”.
Solo espero que al actual Gobierno de España no se le ocurra aceptar en 2025 una legislación específica -diseñada, al parecer, en la famosa hoja de ruta- para los futuros tráficos comerciales desde/hacia Melilla si es que al final se recuperan algún día. Y en ella incluyo la aplicación del régimen de viajeros que Marruecos ha hurtado a los ciudadanos comunitarios que entran por Melilla o Ceuta y que a pesar del “trabajo duro y arduo” que según ella se viene desarrollando pero del que no se ha visto avance alguno en estos seis últimos años.
La señora Moh debería explicar su falta de interés y la negativa de su partido en votar a favor de que se apruebe una OSP para las conexiones aéreas con Madrid y Málaga cuyo actual monopolio en manos de IBERIA/AirNostrum impide por sus altos precios el desarrollo turístico de Melilla. De solucionar el problema de la aproximación al aeropuerto por culpa de las nubes bajas y la falta de longitud de la pista para que puedan operar otras aeronaves con plena capacidad de carga en el despegue ni se le ocurre plantearlo al Ministerio correspondiente no sea que se enfaden con ella y le manden de vuelta a dar clases de flauta.
Del mejor contrato marítimo de la historia solo cabe decir que ha sido un fracaso porque hemos perdido conectividad. Desde enero solo va a operar una compañía en cada una de las dos líneas -con peores horarios a juicio de los melillenses- y que va a favorecer un monopolio “de facto” en el transporte de mercancías pues en el contrato se les “olvidó” limitar el precio para el mismo y la compañía Balearia ya ha anunciado la subida del precio de los fletes aparte de haber perdido la capacidad de carga que aportaba Trasmediterránea desde Málaga a los operadores logísticos. Me temo que esta última naviera también subirá los fletes en las rutas desde Motril y Almería. Pronto veremos la cantidad de plataformas que se quedan sin poder embarcar a diario y el incremento de precios que va a repercutir directamente en los consumidores de Melilla. Ya lo dijo el propio presidente de Balearia en octubre pasado cuando calificó este contrato de “perverso”.
Y, por si fuera poco, el RD 332/2023 esperado desde 2017 y que era necesario para aplicar las compensaciones al transporte de mercancías se ha quedado en una pírrica cantidad de125.000 euros sobre los más de 4 millones de euros que se ingresan anualmente según consta en el Pliego del contrato marítimo y sin que se beneficien los productos de primera necesidad ni pudieran solicitarla todos los empresarios de la ciudad. Decía la susodicha que no se podían bonificar más que al 50% cuando en Baleares se ha alcanzado hasta el 100%. ¿Por qué no se ha publicado aún quiénes se han podido beneficiar y el importe pagado a cada uno? Esto ha sido otro timo de la estampita para inmensa mayoría de los empresarios melillenses.
Ahora que para “timo” el de la eliminación de la bonificación al 50% de las cuotas patronales de los seguros sociales que disfrutábamos desde 2004. Primero, nos vendió la excusa que era una exigencia de Europa. Falso de toda falsedad. Luego, que un RD Ley no se podía rectificar -otra mentira- pero que lo iba a arreglar y se inventó lo de la subvención de 262 euros que era mejor para todos. Y después de muchas presiones, se saca de la chistera otra modificación que no nos devuelve a la situación preexistente pues deja fuera algunos tipos de contratos y se incluyen nuevas limitaciones.
Del tema del Hospital y la sanidad en Melilla les remito a los comunicados al respecto del Colegio de Médicos y los Sindicatos y a los artículos de Fidel Moga que conoce bien los entresijos del mismo y la manera de gestionar de la señora Moh.
Por cierto, un tema del que no ha vuelto a decir ni pío tras el cierre fronterizo del Covid: ¿con toda la millonaria inversión en la llamada “frontera inteligente” se ha previsto la reapertura del paso de Farhana o eso no está incluido en la famosa hoja de ruta de Albares y de Marlaska? ¿Ha servido para reducir las colas el llamado Sistema de Paso Ágil (SAP) desde que puso en funcionamiento en junio según ella? Los sindicatos de la Policía se siguen quejando de la falta de personal y de las instalaciones que han costado tantos millones.
Del famoso Plan Integral de Desarrollo Socioeconómico -que nos vendieron en noviembre del 2022 a bombo y platillo- poco o nada se ha visto plasmado en la realidad. De los millones de euros perdidos en formación a los desempleados y de la pésima gestión de los Planes de Empleo ya no sabe por dónde escaparse y justificar lo injustificable de su pésima gestión.
No sé ustedes lo que opinarán pero yo, por desgracia, estoy convencido de que si en el 2025 no se van esta señora y su amo a su casa no vamos a ver ninguno de estos temas solucionados, entre otras cosas, porque es incapaz de pelearlos donde corresponde en vez de dedicarse a repetir como papagayo -bien pagado, por cierto- las consignas y las notas de prensa que le mandan desde los madriles.
A pesar de ello, como continúo creyendo en los Reyes Magos y en los milagros, quiero terminar con el mensaje que finalicé al año pasado: “Ojalá este 2025 sea el año de las ilusiones cumplidas y el inicio de un nuevo futuro para Melilla” y añado como nueva petición que la reinstauración de la Cámara de Comercio de Melilla sea una realidad y dejéis de dar la tabarra con la entrada en la Unión Aduanera.