Las fuerzas de seguridad marroquíes han desmantelado este miércoles una célula terrorista vinculada al Daesh, integrada por doce miembros de entre 18 y 40 años. Los detenidos operaban en varias ciudades del país y planeaban atentados contra miembros de las fuerzas de seguridad, instalaciones estratégicas e intereses extranjeros en Marruecos.
Según informó el polo de seguridad marroquí DGSN-DGST en un comunicado, los arrestos se llevaron a cabo en Casablanca, Fez, Tánger, Azemour, Taunat, Guercif, Ulad Tayma, Tamesna, las afueras de Rabat y El Aaiún, en el Sáhara Occidental. La operación, descrita como una acción preventiva ante un "complot terrorista muy peligroso", contó con el despliegue de francotiradores, técnicos en detección de explosivos y unidades caninas policiales.
Planes de ataque y lealtad al Daesh
Los detenidos habían jurado lealtad al Daesh y mantenían contacto con la filial del grupo en la región del Sahel. De acuerdo con la agencia estatal marroquí MAP, la célula preparaba asesinatos de agentes de seguridad, con la intención de secuestrarlos, ejecutarles y profanar sus cuerpos. Además, planeaban atentar contra infraestructuras económicas y estratégicas y provocar incendios intencionados como parte de su estrategia de terror.
Uno de los hallazgos más preocupantes fue el descubrimiento de artefactos explosivos en proceso de ensamblaje en una vivienda de Tamesna. Según las autoridades, se encontraron cuatro bombas de gas modificadas, con clavos y productos químicos, preparadas para ser detonadas de forma remota mediante teléfonos móviles. También se incautaron prismáticos y material digital relacionado con los planes terroristas.
Vigilancia y cooperación en la lucha antiterrorista
La célula terrorista había identificado posibles objetivos en varias ciudades antes de recibir el visto bueno del Daesh en el Sahel. Las fuerzas de seguridad marroquíes evacuaron a los residentes cercanos a las zonas de operación para minimizar riesgos durante los arrestos.
Este desmantelamiento se enmarca dentro de la estrecha cooperación entre Marruecos y España en la lucha contra el terrorismo yihadista, un frente en el que ambos países han trabajado de manera conjunta en los últimos años. De hecho, recientes investigaciones han señalado que en 2024, el 34,7% de los yihadistas detenidos en España tenían origen en Ceuta o Melilla, lo que subraya la importancia de la vigilancia en la región.
Las autoridades continúan con la investigación para determinar posibles vínculos de la célula con otros grupos terroristas y esclarecer si existen más miembros implicados en estos planes.