Cada jornada queda patente que los puntos de vista de cada partido tienen poco o nada en común con los de las demás formaciones
La gestión de los menores extranjeros no acompañados y las cuestiones de seguridad derivadas de este asunto son una materia en la que las diferentes fuerzas políticas con representación en la Asamblea no se ponen de acuerdo y nada hace pensar que ese desencuentro se vaya a solucionar. Cada jornada queda patente que los puntos de vista de cada partido tienen poco o nada en común con los de las demás formaciones. Coalición por Melilla (CpM), lleva tiempo planteando que el Gobierno central ha de recuperar las competencias en esta cuestión, al acusar a la Consejería de Bienestar Social de la Ciudad de no ser capaz de gestionar este problema. La formación cepemista había sugerido hace semanas que se consultase a los melillenses sobre la conveniencia de que se devuelvan al Ejecutivo de Madrid estas competencias, y ayer Aberchán explicó cómo pretende hacer la consulta. Para ello propone tres formas: con encuestas a pie de calle, mediante las redes sociales o a través de llamadas telefónicas. No parece sencillo que se pueda alcanzar una respuesta fiable de los melillenses con este planteamiento. CpM deberá explicar cómo controlar que un ciudadano que haya mostrado su parecer por redes sociales no exprese por segunda vez su ‘voto’ por medio de la línea telefónica o a pie de calle. Otra de las cuestiones en las que más desencuentro está habiendo es en el blindaje del puerto. Mientras la Autoridad Portuaria está apostando por la instalación de concertinas que disuadan a los que pretendan colarse como polizones en los barcos, CpM rechaza esas actuaciones y también lo hace el PSOE, cuya secretaria general local, Gloria Rojas, solicitó ayer que se “impermeabilice” la zona de seguridad del puerto con más presencia policial. Y en el asunto de los menores extranjeros, ayer también fueron noticia las palabras del Defensor del Pueblo, Francisco Fernández Marugán, quien afirmó que en Melilla “están pasando cosas demasiado desagradables”. En una comisión mixta con el Congreso, Marugán expresó su preocupación por la situación de los menores e instó a diputados y senadores a que conozcan “por su cuenta” qué ocurre con los niños de la calle en esta ciudad. Va siendo hora de que partidos e instituciones alcancen acuerdos para solucionar este asunto, de gran importancia para Melilla.