Melilla enfrenta una nueva oleada de críticas por la acumulación de basura y la insalubridad en diversos puntos de la ciudad. Ciudadanos y colectivos ecologistas han denunciado el estado de abandono en el que se encuentran varias zonas urbanas, generando un creciente malestar entre los vecinos. Desde Coalición por Melilla (CpM), la diputada Cecilia González ha señalado directamente al consejero de Medio Ambiente, Daniel Ventura, como responsable de la situación, mientras que Guelaya Ecologistas en Acción también ha sumado su voz a las denuncias.
Basura y ratas
Según CpM, han recibido numerosas quejas de ciudadanos que alertan sobre la presencia de roedores en un solar ubicado frente al Instituto Reina Victoria Eugenia y detrás del centro Gámez Morón, entre las calles General Astillero y Poeta Salvador Rueda. González ha señalado que “los roedores caminan a su gusto” por la zona y que se trata de un foco de infección que supone un riesgo sanitario para los estudiantes del instituto y los transeúntes.
La diputada de CpM ha criticado que el Gobierno local no haya tomado medidas contundentes para resolver el problema. “Nos preguntamos qué tiene que pasar para que el consejero de Medio Ambiente asuma su responsabilidad respecto al bienestar ciudadano y ponga fin a esta avergonzante y peligrosa situación”, expresó. Además, destacó la contradicción entre la promoción turística de la ciudad y el estado de abandono en el que se encuentran algunos espacios públicos.
“La Ciudad Autónoma destinará más de 13 millones de euros de los presupuestos de 2025 para promocionar Melilla como destino turístico, incluyendo 6,5 millones en bonos turísticos. Pero, ¿qué imagen estamos dando cuando lo primero que se encuentran los visitantes es suciedad y abandono nada más cruzar la frontera?”, cuestionó González.
Colegio Buen Consejo
Las críticas no se limitan a la denuncia de CpM. La organización ecologista Guelaya también ha alertado sobre la insalubridad en otras zonas de la ciudad. En un comunicado reciente, señalaron que algunas aceras cercanas al colegio Buen Consejo se encuentran en un estado deplorable, con acumulación de residuos y suciedad que afectan directamente a los niños y niñas que transitan por la zona.
“Estas imágenes son de un lugar muy cercano al colegio Buen Consejo de Melilla. Es una de las aceras por las que se accede a ese colegio y por la que transitan niños en edad escolar. También es un lugar peligroso y un foco de infecciones, como otros muchos lugares de Melilla”, afirmaron desde Guelaya.
El colectivo también criticó la respuesta del Gobierno local a estas denuncias, acusando al responsable de Medio Ambiente de intentar desacreditar a quienes exponen estas problemáticas. “Acabar con este desastre de gestión medioambiental debería ser la prioridad del responsable de Medio Ambiente, pero parece que ha optado por intentar amedrentar a los colectivos que denunciamos esta situación con continuos ataques en prensa”, señalaron.
Problema recurrente
Esta no es la primera vez que la falta de limpieza y los vertidos ilegales generan controversia en Melilla. En diversas ocasiones, organizaciones como Guelaya han denunciado la proliferación de escombros y residuos en espacios públicos y en las zonas periféricas de la ciudad.
En enero, la misma organización alertó sobre la existencia de múltiples puntos de vertido ilegal que no solo afectan al medio ambiente, sino que también generan problemas de salubridad. Según denunciaron en su momento, la falta de control y de medidas eficaces por parte de la administración ha agravado la situación en los últimos años.
Ahora, con nuevas denuncias centradas en áreas urbanas y cercanas a centros educativos, el problema cobra aún más relevancia, ya que no solo afecta al entorno, sino también a la calidad de vida de los vecinos y la seguridad sanitaria de los más vulnerables.
Desde la oposición, CpM exige acciones inmediatas y acusa al Gobierno de inacción. Por su parte, el colectivo ecologista ha reafirmado su compromiso de seguir denunciando la situación y presionando a las autoridades para que tomen cartas en el asunto.
Mientras tanto, los vecinos de las zonas afectadas continúan enfrentando los efectos de la falta de higiene y mantenimiento en los espacios urbanos. Las imágenes de solares abandonados, basura acumulada y presencia de roedores siguen siendo una constante en varias zonas de la ciudad, alimentando la indignación de quienes exigen soluciones.
La limpieza y el mantenimiento de Melilla vuelven a estar en el centro del debate público, y la respuesta del Gobierno será clave para determinar si se trata de un problema con solución a corto plazo o de una situación que seguirá deteriorando la imagen de la ciudad.