La jefa de la Unidad contra la Violencia de Género asegura que “sin que nadie comenta un error, hay márgenes que no se controlan” l También afirma que la víctima “quizás no fue consciente del riesgo real que tenía”.
“Las cosas, aunque sea triste decirlo, se han hecho bien, aunque al final haya habido una víctima”. De esta forma, la jefa de la Unidad contra la Violencia de Género de la Delegación del Gobierno, María Teresa Fernández, desmintió ayer las declaraciones realizadas el martes a El Faro por la viceconsejera de la Mujer, Fadela Mohatar, quién aseguró que estaba claro que “algo había fallado” en el caso de Hannan Outmane, la mujer que murió apuñalada en zona de la Alcazaba junto a un amigo, Mohamed Ohadik. Sin embargo, ayer la jefa de la Unidad de Coordinación contra la Violencia de Género insistió en que no había visto “ningún agujero negro del que poder hablar, de algún acto mal hecho o de algo que no se haya hecho” para evitar la muerte de Outmane. Es más, señaló que “el protocolo ha funcionado, se ha hecho bien y se ha llevado a término”.
Fernández destacó que éstas eran las conclusiones a las que habían llegado todas las instituciones que participaron ayer en la reunión de la Mesa de Coordinación contra la Violencia de Género que se celebró en la Delegación del Gobierno, incluida la propia viceconsejera de la Mujer, Fadela Mohatar. Esta reunión se llevó a cabo antes del acto que organizó la Ciudad y la Delegación en las puertas de la Asamblea para guardar un minuto de silencio por las dos víctimas del crimen de la Alcazaba, Hannan Outmane y Mohamed Ohadik.
No era consciente del riesgo
La jefa de la Unidad contra la Violencia de Género resaltó a El Faro que “todo se había realizado correctamente” en este caso e insistió en que no se puede decir lo contrario cuando todas las instituciones “han hecho bien” su función. “No podemos buscar quién tiene la responsabilidad donde no la hay”, explicó Fernández y añadió que el único culpable de lo sucedido, pues todo apunta a ello, fue el ex marido de Outmane.
Otro de los puntos que resaltó la jefa de la Unidad contra la Violencia de Género de la Delegación es que “la víctima era una mujer muy joven y tal vez no era consciente del riesgo real que tenía”.
Fernández destacó que Outmane contaba con protección policial y su caso estuvo catalogado con diferentes niveles de riesgo, hasta llegar “al nivel de riesgo alto”. Aseguró que el policía que se encargaba de su caso casi tenía una “relación de familia” con la mujer. La acompañaba a realizar gestiones y la llamaba de forma frecuente para saber cómo estaba, indicó la jefa de la Unidad de Violencia de Género.
También señaló que la joven llevaba el teléfono que le dio la Policía para que avisara de forma directa cuando se sintiera acosada por su ex marido. Además, apuntó que el policía que estaba encargado del caso de esta mujer “no sabía que había salido” en compañía de este amigo el pasado día 2, cuando fue apuñalada.
Fernández aporta otros datos sobre la víctima, como que su madre la “estaba coaccionando” para que volviera con ex marido, así como que Outmane no fue clara a la hora de hacer las declaraciones contra su ex pareja cuando presentó las denuncias por violencia de género y eso evitó que el agresor “no estuviera en la cárcel”. No obstante, la jefa de la Unidad contra la Violencia de Género aseveró que todo esto no quiere decir que Outmane tuviera la culpa de lo que sucedió. “Es horrible decirlo, pero si alguien te quiere matar, lo puede hacer”, añadió. Además, resalto que aún hay muchos otros datos sobre la investigación que están “bajo secreto de sumario” y que no se pueden dar a conocer.
Por otro lado, la jefa de la Unidad contra la Violencia de Género mostró su confianza en que “el único camino para las mujeres víctimas de la violencia es denunciar su caso”. Aseveró que sólo 14 de las mujeres que murieron a manos de sus parejas en toda España pusieron denuncias por malos tratos, por ello insistió en que no se puede hacer una relación directa de que la denuncia lleva a que puedan morir. “Eso no es cierto”, añadió.
Por último, Fernández resaltó que aunque Outmane “no ha podido salir” de la situación de violencia, “esperamos que haya pocas y puedan salir”.
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