La delegada del Gobierno, Sabrina Moh, asevera que esta institución “no puede entrar” en los precios elevados que hay actualmente de los viajes de barco, aunque reconoce que ha recibido quejas por este tema.
Al respecto, el presidente del PP de Melilla, Juan José Imbroda, se preguntó ayer qué va a pasar con las conexiones marítimas cuando ahora cuestan los viejas 489 euros en camarote o 118 en butaca solo ida en uno de los barcos y en el otro 85 euros en butaca por trayecto. Subrayó que dejar “albur de las navieras” el mercado es “dar un paso atrás”, ya que serán ellas las que marquen no solo los precios para los melillenses, sino el tipo de barco y lo que tardará en hacer estas rutas con la península.
Moh también recordó que no se puede viajar libremente aún desde Melilla a la península. Aunque se vaya a incrementar el cupo de personas que pueden ir en los barcos que hacen estas rutas, solo se puede emprender este viaje por las excepciones que vienen recogidas en las normativas del estado de alarma.
Insistió en que las salidas de la ciudad deben estar justificadas y para volver, se precisa de la autorización de la Delegación del Gobierno. Van a continuar los controles en la llegada al puerto de la ciudad, añadió la delegada del Gobierno, y también subrayó que aquellas personas que vienen de otros países tendrán que guardar una cuarentena de 15 días en sus casas como también ocurre en el resto de la península.
Se tendrá que aplicar a Ceuta Baleares y Canarias ,entonces no salimos nadie de casa .
Si es así me voy a la peni y no vuelvo jamás
Una muy mala noticia. Esto es lo único que nos faltaba ya. Las navieras al borde de la ruina, el estado no las compensa por el esfuerzo realizado, la autoridad portuaria aplicándoles tasas abusivas y al final a pagarlo el ciudadano.
Ha convertido a Melilla en un agujero africano con su desgobierno.
Nefastos y ruinosos desgobernantes.