En la ruta de tapas por Melilla, El Faro ha hecho una parada en el Mesón de la Hoya. Entre sus especialidades, todos los platos de carne. Su propietario, Valentín Giménez, explicó a este diario cuáles son los platos que lo han hecho merecedor del solete de la Guía Repsol. Esta guía dice del Mesón de la Hoya que: "Los embutidos están en las mesas, pero comparten protagonismo con una cocina casera a base de manitas, callos con garbanzos, albóndigas o el pepito de solomillo con alioli".
Este mesón tiene una puntuación de 4,2 y 428 reseñas en Google. De lo que más se comenta entre los clientes es de la calidad del servicio y de la carne, como no podía ser de otra manera. A finales de este año, el Mesón de la Hoya cumplirá la década abierto al público en Melilla. Valentín Giménez recomendó a El Faro una serie de platos que caracterizan a su bar. Entre ellos, las albóndigas con tomate, la carne en salsa, los callos, las manitas e cerdo y las orejas.
Tapas
La primera tapa que sacó Valentín fue las orejas, una de las tapas que recomiendan no perderse cuando se va a este mesón en la Guía Repsol. Esta comida, explicó el propietario del bar, no se veía mucho en Melilla. En un viaje que hizo a Madrid hace 30 años,tuvo la oportunidad de probarlas y le gustaron tanto que decidió hacerlas en su bar. "No se ve en muchos sitios", comentó. Al principio, Valentín Giménez regentaba el bar del Hospital Militar, donde comenzó a elaborar el plato. Este melillense explicó a El Faro que en aquel lugar tuvo mucho éxito porque había muchos militares que eran de Madrid o alrededores, donde es muy típico. "La oreja ahora mismo está en Melilla por mí", pudo presumir este empresario hostelero. La tapa trae buena cantidad de orejas de cerdo y el sabor es muy bueno. Nada que envidiar a los del centro de España. En segundo lugar, las manitas de cerdo, famosas en la Guía Repsol. Las manitas están guisadas y el pimiento es protagonista de la salsa que las acompaña. En cada plato viene una manita de cerdo y patatas. "La gente lo pide muchísimo", reconoció. La carne de las manitas están tan bien cocinadas que se deshacen solas. No hace falta ni cortarlas con el cuchillo para poder comerlas. "No sé como las hace mi cocinero, pero me encantan", reconoció el propietario del mesón. La receta de las manitas de cerdo son de la hermana de Valentín Giménez. Aunque vive en Elche, en un viaje a Melilla hizo este plato delante de la cocinera del mesón, y a partir de entonces se convirtió en un plato estrella. Para continuar con la comida, la siguiente tapa fueron los callos. En este mesón siguen la receta típica andaluza, con garbanzos. El sabor de los callos es un poco picante y viene con trozos de chorizo. "A la gente aquí le gustan los callos con garbanzos", dijo Giménez. A pesar de que prefiere los callos con garbanzos, que considera que están más bueno, también reconoce que los callos madrileños, sin garbanzos, también están muy buenos. La carne en salsa no podía faltar en el mesón. Si hay una tapa típica, que sirven en casi todos los locales de Melilla, esa es este plato. Una cazuela de barro con bastantes trozos de carne y unas patatas fritas para acompañar. "En perritos con alioli es el número uno", reconoció. Por último las albóndigas, muy recomendadas por la Guía Repsol también. En esta tapa vienen dos albóndigas de ternera, muy tiernas, en salsa de tomate y con patatas de guarnición. "Mi cocinera lo hace formidable", aseguró el propietario del mesón.
Especialistas
Estas son solo una selección de este hostelero, pero el Mesón de la Hoya cuenta con muchas más. El embutido y la carne son los productos estrella en este local. "Somos especialistas en carne y embutidos", comentó Giménez. Aunque la carne es lo que mejor hacen, el propietario del bar comentó que también cuentan con pescado al corte o marisco como gambas o langostinos cuando hay, dijo, frescos en el mercado. En este local trabajan una cocinera y un cocinero. Para Valentín Giménez son excepcionales. Por ello, confesó que pocas veces hace de comer en su casa. Prefiere coger cualquier plato que hayan salido de su cocina. Entre sus platos favoritos están las manitas y las orejas. "En mi casa pido una pizza", confesó.