El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha anunciado este miércoles, en el Congreso de los Diputados, que España y Marruecos están “de acuerdo en que las aduanas de Melilla y Ceuta funcionen en régimen de expedición comercial”. Sánchez se ha referido, así, a un comercio “regular, regulado y transparente, conforme a los más exigentes estándares internacionales”, como “la mejor manera de que no vuelva el comercio atípico”.
Por lo tanto, el presidente ha afirmado que lo que se va a hacer a ambos lados de la frontera es “asegurar que se cumpla la legalidad”, ya que se dispone de los instrumentos necesarios para regular “el tráfico normal de personas y mercancías”.
Esa será la mejor manera, ha reafirmado Sánchez, de que las dos ciudades autónomas se desarrollen “sin la presión de la excepcionalidad permanente y la precariedad”. Además, Sánchez ha insistido en que tanto Melilla como Ceuta “tienen una clara vocación de prestar servicios a las empresas españolas, que, cada vez, por cierto, invierten más y comercian más con Marruecos y el resto del continente africano”.
Todo ello, ha dicho el presidente, “sólo será posible con un marco de normalidad fronteriza como el que se ha comprometido en la declaración conjunta con Marruecos”, que “constituye un sistema de garantías sobre la integridad territorial de España”. En este sentido, Sánchez ha recalcado, por dos veces, la españolidad de las dos ciudades autónomas. Primero, cuando ha dicho que no aceptan “que se hable de Melilla y Ceuta como de ciudades ocupadas, porque son territorio español y territorio europeo oficialmente reconocido”. Y, a continuación, cuando ha recalcado que “la soberanía española sobre Melilla y Ceuta está fuera de toda duda, como sucede con cualquier otra parte del territorio nacional”.
Sin embargo, la portavoz del Partido Popular (PP) en el Congreso, Cuca Gamarra, ha preguntado “de qué ha servido ese cambio en la posición española (sobre el Sáhara) si aún no se ha creado la aduana comercial de Ceuta y la de Melilla sigue cerrada”. “¿A qué se deben los retrasos?”, ha interrogado Gamarra, quien ha considerado el “fracaso” de Sánchez que la aduana comercial continúe cerrada.
De la misma forma, la dirigente popular ha instado al presidente del Gobierno a que “cumpla exigiendo integrar las dos ciudades autónomas en el espacio Schengen y que sean consideradas como la frontera sur de Europa en el nuevo concepto estratégico de la Alianza”.
Por su parte, el presidente de Vox, Santiago Abascal, ha exigido “que Marruecos reconozca, de una vez por todas, la soberanía española de Melilla y Ceuta, ciudades españolas antes de la existencia del Reino de Marruecos”.
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