Queridísimos:
Esta playa, familiar, somnolienta y cálida donde me refugio, huyendo de los pelmazos que molestar suelen las siestas estivales, es un lugar limítrofe con la tierra del cante, del olivo y de la mina. No le falta más que el levante sea un poco más fuerte para ser el lugar perfecto que siempre soñé.
Por eso, para seguir soñando con el runrún bronco de las olas de la playa de la Victoria de Cádiz, me voy derecho a Pemán, para empezar esta semana. El por qué me voy derecho a Pemán tiene una doble justificación; la primera, porque me subleva el inicuo olvido al que su obra toda está sometida. La segunda, más personal y doméstica, porque me da la republicanísima gana. Veréis; decía al principio que, a esta playa, de la que soy transeúnte, solo le faltaba que el levante sea un poco más fuerte. ¡Qué queréis que os diga! Ya me estoy imaginando la catarata de denuestos y puyas que esta afirmación merece. Pero me voy a Pemán, como más arriba señalé y encuentro mi coartada perfecta; don José María nos dejó dicho en "Yambos del viento de levante", que este era viento sabio, trotador de los mundos, que en las olas volcabas las naves de “alto bordo", además de "atleta de los aires, con músculos de luz y pies de plata". Con una definición así ¿quién no es partidario del familiar compañero de las saladas esquinas gaditanas? Calderón de la Barca, esquina con Zorrilla, por ejemplo.
Otrosí digo; ¿cómo no extasiarse cuando Pemán nos relata, como el que no quiere la cosa, que "los genios del mar cierran, a golpes, balcones invisibles y ventanas?"
Merece la pena zambullirse, ahora que el sol chilla en mi terraza, en el mundo de la eterna Belleza, así con mayúsculas, donde sin duda habita el gran Pemán, mientras nosotros nos afanamos inútilmente en expulsar a los mercaderes del templo, como nos dejó dicho Pedro Miguel Lamet, en esta ocasión agudo pensador jesuita.
No quiero dejar de escribir estas líneas personales, y me las vais a perdonar, porque quizás el olvido inicuo promovido por los francotiradores de la frustración y el resentimiento a la obra de Pemán se deba a que no se le perdona que se le entienda; que, en el fondo, Lamet nos regala el argumento, haya sido un gran pedagogo del lenguaje, un mago de la imagen limpia, igual que un atardecer en el Campo del Sur gaditano.
Cuando se observa la garrulería parlamentaria de las señoras Montero (doña María Jesús y doña Irene María), o el pedregoso sectarismo del señor Bolaños (don Félix), o los enfrentamientos que mantiene con la sindéresis, la prosodia, la sintaxis y hasta con la ortografía la señora Díaz (Yoli, "O Trapiño") o los tropezones lingüísticos de la señora Gamarra (doña “Cuca”), más nos damos cuenta de la necesidad de la presencia de Pemán para evitar la confusión frecuente y maliciosa entre las burbujas de un "redbull" y las de un "Moet Chandon". Además, sospecho que el desvío a Pemán también se debe a que eso de ser católico está siempre mal visto en el mundo de la pluma y que tienes que pertenecer al club de la "zeja" o a cualquier otra banda de titiriteros, todos millonarios y todos izquierdistas por supuesto.
Estoy viendo que a lo tonto modorro se me está escapando el artículo entre los dedos, como se escapan las cuentas de un rosario y que no voy a tener tiempo de "repasar" a estas gentes.
Aun así, ¿quién no se sorprende de que el Sánchez quiera "recuperar" el ministerio de la Vivienda y colocar en él a Ada Colau, distinguida defensora "okupa" y nefasta ex alcaldesa de Barcelona, inventora del denominado “urbanismo táctico“, misterioso concepto que nadie sabe lo que es. Claro, que para que esta desgracia ocurra, es preciso que el Sánchez sea investido presidente del gobierno y ya sabemos que las desgracias nunca vienen solas.
Leer a Pemán es un bálsamo que nos alivia la llaga que Puigdemont puede hacer en el cuerpo torturado de España. Por cierto, es bueno recordar ahora que andamos enzarzados en tribales escaramuzas idiomáticas, que el 19 de abril de 1970, la Tercera de ABC se vio honrada con un artículo de Pemán; "El catalán, un vaso de agua clara", donde decía que "el catalán, en sí, no es un problema: es una evidencia. Lo que ocurre es que las evidencias contorsionadas cobran fisonomía de problemas cuando son manejadas por los políticos. ¡que eso sí que son problema!" Cuando se publicó este artículo era jefe del Estado el Generalísimo Franco (don Francisco) y vicepresidente del gobierno y ministro de la presidencia el almirante Carrero (don Luis), el ministro de Información y Turismo (vulgo censura), era el señor Sánchez Bella (don Alfredo). Nada más y nada menos.
Hablando de garrulerías; Yoli, O' Trapiño, se empeña en llamar "país de países” a España. Es una verdadera pena que "O' Trapiño" confunda los conceptos de país, nación y estado y otros elementales conceptos de la organización general que, desde la romanización, vienen rigiendo la civilización cristiana, en manos ahora de doña Ursula no sé qué y otros caniches masones y europeos y perdón por la redundancia.
La semana sigue trufada de rumores de pactos, dimisiones, abandonos, esperanzas y desencantos. Don Alberto sigue buscando, como Diógenes, al "hombre" que sea el signo y la hora de los empeños imposibles. La verdad es que siempre tuve por cierto aquello de que los empeños imposibles generan melancolía. Melancolía y nostalgia son dos conceptos distintos y tiempo tendrá don Alberto de comprobarlo en la travesía del Gobi que tendrá que atravesar.
Un señor, Espinosa de los Monteros abandona su formación en el peor momento posible, momento indefinible para eso que llamamos "derecha". El buen hombre lo anuncia en el Congreso y no admite preguntas a los esforzados periodistas que aguantan impávidos el desdén. El reporter "Tribulete", ”que en todas partes se mete,” que tanto me hizo divertir en mi infancia, era un Aristóteles si lo comparamos con estos plumíferos convertidos en galeotes.
He notado mientras apuro una manzanilla en el bar playero de siempre, que los gerifaltes de la cosa hablan ya de "territorios" en vez de autonomías, provincias, regiones, comarcas y otras maneras de organización administrativa de nuestra patria. Como nada sucede por casualidad, me temo que el vocablo tiene trampa. Como trampa tiene, a ver si el señor Arenas (don Francisco Javier, "Javie") nos lo aclara, aunque me pongo en lo peor.
Por la radio oigo el desencanto de unos tertulianos, porque una señora Morant de la vida, sedicente ministra de Ciencia, "aún no ha llegado a la tertulia". Uno de ellos apostilla que "siempre llega tarde". No sé a qué viene la crítica; cuando un retraso tiene cierto ritmo de constancia, acaba de ser un modo de puntualidad.
En el horizonte se avizoran grandes signos que, como vengo repitiendo con escaso éxito de crítica y público, anuncian el fin de los tiempos. Véase si no la última "propuesta" de O' Trapiño para conocimiento de la afición; consiste su ajetreada majadería en obligar a que, en el Congreso de los Diputados, a los culiparlantes se les proporcione un pinganillo para que oigan la traducción en español de cualquier soflama o fervorín pronunciado en las denominadas "lenguas cooficiales". Como todo el mundo sabe, en aquella ágora llena de tanta sapiencia (nótese la ironía), todos hablan español; desde el busto que preside hasta el guardia de la caseta de la calle Cedaceros. El señor Vizcaíno Casas (don Fernando) ya describió semejante dislate, a modo de fábula, en su delicioso libro "Las Autonosuyas". Don Fernando (q.e.p.d.), no podía imaginar que llegaría a ser un adelantado a su tiempo. Guardo el libro, como una reliquia.
Como las majaderías no ocurren solas, les relato como punto final la que comprobé estos días entre dos pueblecitos cercanos a la playa donde me refugio. Yendo por una carretera vi a unos hombres que, con unas camisetas blancas y unos pantaloncillos azules, corrían sudosos y jadeantes camino de un pueblo distante a unos tres o cuatro kilómetros. Al llegar al mismo, sin parar, volvían hacia el de origen.
Tengo observado que cada año, se repite este numerito. Al que llega primero, las autoridades locales le entregan un delicado obsequio donado ¡cómo no!, por la excelentísima corporación municipal. Este año, según me dijeron, donaron un reloj de esos de pulsera multifuncional que nunca sabe uno como poner en marcha. Así andamos.
Os informo de los días más bizarros conmemorados recientemente;
Día 7 de agosto; Día Mundial de los Faros.
Día 8 de agosto; Día Internacional del Gato, Día Internacional del Orgasmo Femenino.
Día 9 de agosto; Día Internacional de las Poblaciones Indígenas, Día Internacional de la Solidaridad con la lucha de la Mujer en Sudáfrica y Namibia, Día Mundial de la Caligrafía.
Día 10 de agosto; Día Mundial del León, Día Internacional del Biodiesel.
Día 12 de agosto; Día Internacional de la Juventud, Día Mundial del elefante, Día Internacional del Disco de Vinilo.
Hoy domingo se celebra el Día Mundial de la Zurdera, Día Internacional del Armadillo.
Coda veraniega;
a) Mis espías paraguayos me informan que a "Javie" le ha salido un fuerte competidor por la por la posible presidencia del Senado, en la figura del señor Maroto (don Javier). Dada la personalidad de ambos, el combate puede ser apasionante. Seguiremos informando.
b) Como os he dicho, ayer se celebró el Día Mundial del Elefante, por lo que tuvimos gran celebración.
c) Para conocimiento de la afición, os informo que la ex alcaldesa de Puertollano sigue siendo ministra (en funciones).
Que no le falte agua al elefante.
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