El presidente de la Asociación de Comerciantes de Melilla (Acome), Enrique Alcoba, aseguró a El Faro el pasado viernes que la ampliación en nueve domingos más de la apertura de los grandes almacenes implicaría un “conflicto laboral” en las tiendas de menor tamaño. Asimismo, indicó que el convenio laboral actual del sector impide abrir esos días.
La respuesta de UGT es contundente: exige a la patronal del comercio que se siente en la mesa y negocie uno nuevo. Es más, el secretario de la Federación de Servicios de Movilidad y Consumo de UGT, José Luis Faus, aseveró que “el conflicto laboral ya está abierto desde el momento en el que no se quiere debatir sobre un nuevo convenio”.
Señaló que se tardó mucho en constituir la mesa de negociación y cuando los sindicatos analizaron la propuesta de la patronal se encontraron con que los comerciantes querían actualizar las tablas salariales a la baja, es decir, reducir los salarios de los empleados, aunque no se han incrementado desde hace varios años.
Faus aseveró que la época de crisis ya pasó y que ahora no se puede admitir algo así. Subrayó que los empleados del comercio llevan sin ver sus sueldos actualizados desde inicios del siglo XXI.
El sindicalista explicó que el convenio laboral actual es “tan arcaico” y antiguo (de 1996) que recoge en uno de sus artículos cómo proceder si un dependiente tiene que ausentarse del trabajo unos meses porque es llamado para hacer el servicio militar.
Es más, destacó que las tablas salariales están en pesetas. Por ello, indicó que los sindicatos no van a poner ningún problema en actualizar el convenio y recoger situación real del sector, así como nuevas medias, como la apertura de las tiendas en domingo.
Faus indicó que los melillenses son ciudadanos de costumbres y que siempre compran en las mismas tiendas por lo que no cree que estos momentos el sector esté peor que cuando estaba la crisis económica en todo el país. De hecho, apuntó que las grandes superficies son las que más notan que hay problemas en la frontera porque no pasan tantos marroquíes para adquirir productos.
Por ello, el secretario de la Federación de Movilidad y Consumo de UGT de Melilla insistió en que, para evitar que los comercios que quieran abrir en domingo comentan una “infracción”, la patronal debe negociar un nuevo convenio.
En cuanto a la medida de que se puedan abrir más domingos para las grandes superficies, UGT indicó que estarán vigilantes para que los empleados de esas tiendas reciban el dinero correspondiente por trabajar en festivo y que se cumplan los descansos.
Además, el ugetista indicó que se pueden crear algunos puestos de trabajo al tener que descansar parte de la plantilla de las tiendas. En estas dos ideas coincide con CCOO, como ya publicó este periódico el domingo.
Faus insistió en que las grandes superficies y las franquicias cuentan con un convenio laboral que recoge las nuevas situaciones del mercado. En cambio, manifestó que los comerciantes melillenses “no tienen los deberes bien hechos” en este aspecto.
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