La primavera es época de celebraciones. Con la llegada de abril no solo llega la Feria de Sevilla sino que se abre la temporada de bodas, comuniones y demás eventos en los que la etiqueta es muy importante y vestir elegante y acorde al momento se convierte en a veces en un quebradero de cabeza para muchos.
A pesar de que normalmente se le presta más atención a la moda femenina de invitada por los numerosos detalles que requiere llevar un buen outfit: vestidos, zapatos, bolso o complementos, la indumentaria masculina también está llena de elementos que son importantes y que se deben cuidar al máximo. Vestirse requiere de ciertos códigos y el dress code para el hombre solicita llevar traje.
No hay por qué saber de todo y mucho menos ser expertos en moda, pero el mundo del traje es bastante complejo y todas sus piezas deben adaptarse a la perfección al cuerpo del hombre. Para saber más acerca de cómo llevar esta prenda de ropa tan formal, El Faro ha consultado a una experta en el tema, Manuela López Pérez de la tienda especializada en ropa de caballero Paco Milán.
Esta melillense lleva toda una vida entre trajes de hombre y sabe perfectamente cómo sí y cómo no tiene que ser un traje. Desde su experiencia, señala que uno de los puntos más importantes del dos piezas es el puño de la chaqueta. Este nunca tiene que ser demasiado largo. Debe quedar perfecto, un poco por encima de donde termina la muñeca, para que la manga de la camisa quede sobresaliendo. Jamás esta puede quedar demasiado larga cubriendo la mano.
"Lleves gemelos o no, si lo llevas es aún más importante, la camisa se tiene que ver un poquito", aclaró la vendedora. Por esta razón, al ser esencial que quede así, en esta tienda tienen sastres muy curtidos en el mundo del traje que ajustan a cada cliente las prendas para que queden lo mejor posible.
Otro de los detalles de los que ha hablado Manuela López con El Faro es del largo del pantalón. En los últimos años se ha convertido en tendencia que los pantalones queden por encima del tobillo y si es sin calcetín y mostrando la pierna mucho mejor. Una moda que no convence mucho a la dependienta.
"A mí personalmente no me gusta, ahora están viniendo los pantalones más estrechos y no pueden tapar el zapato como les gusta a muchos clientes", explica. En su opinión, el pantalón que no hay que llevar nunca es el que le sobra tela. Mucho menos en el caso en el que sean tipo pitillo. "Hay de todo, pero el pantalón nunca tiene que hacer mucha arruga abajo. Tampoco que se vea todo el zapato, eso no me gusta, pero habrá que estar a la moda", añadió.
Otro de los consejos que ha aportado es que hay que elegir bien la talla. Es muy importante conocer cuál es la correcta. Tal y como ha reseñado, a su tienda llegan decenas de clientes que creen que su talla es una, cuando en realidad el traje le queda completamente estrecho o demasiado grande. Este tiene que quedar bien, ni demasiado ancho ni muy ajustado.
"Cuando te pones la chaqueta, coges las solapas y las estiras no puede sobrar mucho, pero también tiene que cerrarte bien el botón", aclara. "No puedes usar dos tallas más porque a ti te guste la chaqueta ancha, tiene que quedar bien", añade.
De igual manera no solo hay que fijarse en el ancho sino también en el largo. El cuello tiene que quedar perfectamente acoplado al cuerpo y no debe sobrar tela por debajo de la cintura.
Al hilo de esta cuestión, cabe resaltar que para que un traje quede lo mejor posible tiene que ser bueno. Esto no quiere decir que sea caro ni que haya que rascarse el bolsillo a la hora de adquirir uno sino que nos fijemos en su confección y en los pequeños detalles como las costuras, el forro o el tejido. En definitiva, los acabados. Algo de lo que Manuela López se siente orgullosa, ya que tal y como ha remarcado, en su negocio cuidan el más mínimo detalle a la hora de adquirir la mercancía, eligiendo siempre proveedores dedicados especialmente al mundo del traje y contando con personal especializado para hacer los arreglos en caso de que sean necesarios.
En cuanto a los colores que deben escogerse, Manuela López tiene claro que el azul marino y el negro son tonos que nunca fallan, da igual el evento. Además, subraya que dentro del azul hay numerosas gamas que se pueden elegir, siendo el azulón un tono que ha estado muy en tendencia en los últimos años y que no ha perdido fuerza. Del mismo modo, ahora que llega la temporada primavera-verano, se están incluyendo azules con reflejos claros como el azul cielo que están siendo muy demandados.
En relación a los tejidos, el lino sigue siendo un año más una de las telas más utilizadas para confeccionar trajes en esta época del año. Para este estilo, los beige y tonos claros son los que más se venden. Son chaquetas que no cuentan con doble forro, lo que lo convierten en la prenda ideal para las celebraciones de verano cuando el calor aprieta y se busca la comodidad y que sean fresquitos.
No hay que perder de vista que el traje una vez puesto, debe quedarse puesto completo con chaqueta incluida. Algo que en la mayoría de las ocasiones nunca se cumple, ya que las chaquetas suelen quedarse colgadas de las sillas cuando la fiesta se alarga.
Aunque el traje tiene muchas particularidades, su vestimenta se puede resumir en varias claves que se deben cumplir siempre y en las que hay que prestar atención máxima a la hora de probárselo en la tienda. Estas se pueden resumir en: ¡Ojo con las mangas!, ¡Cuidado con el largo del pantalón!, pero sobre todo ¡Fíjate en el hombro!. Un buen sastre siempre se fijaría en cómo queda el hombro, ya que es la parte de la chaqueta más difícil de confeccionar y la que define si es bueno o no.
A todas estas recomendaciones de la experta melillense se le suman las aportadas por Marta Orío, directora creativa de la firma española de moda masculina Boston, que ha elaborado un decálogo con las claves del estilo para encontrar y acertar con el dos piezas infalible:
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