“De momento, lo que sabemos es lo que estamos viendo. Tenemos pocas esperanzas de que se pueda reabrir la aduana comercial. Hay algunos temas que no se pueden sacar a la luz pública porque la Dirección General de Aduanas nos ha pedido discreción, pero no tenemos muchas esperanzas de que eso se vaya a volver a abrir”. Así lo aseguró este miércoles el presidente de la Confederación de Empresarios de Melilla, José Reyes, que relató las conclusiones extraídas de la reunión que mantuvo la semana pasada con la Dirección de Aduanas en Madrid.
Reyes dijo que se habló mucho con esta institución que justificó que no se les hubiera recibido antes porque no se habían producido avances en las negociaciones.
El presidente de la CEME aseveró que se había producido cuatro reuniones entre las aduanas de España y Marruecos. Pero no todo lo que se habla en estas mesas de trabajo se puede sacar a la luz. Apuntó que la Aduna española ha indicado varias propuestas a Marruecos para que reabriera la aduana, sin embargo, el país vecino insiste de forma constante en que necesita desarrollar el norte del país y que está apostando por su propio puerto que sigue en construcción.
Por ello, la CEME no ve probable que se pueda reabrir la aduana con esta perspectiva. “No hay esperanzas sobre la mesa que nos permitan apostar por esta vía”, remarcó Reyes.
Lo que sí le indicó Aduana a la confederación es que se aprovechen ahora del tiempo que dure tanto Barrio Chino como Farhana y que se haga de la forma “más digna y lo mejor posible”.
Por otro lado, la CEME no se va a rendir y está intentando concertar entrevistas con la Cámara de Comercio de Nador y con varios empresarios para ver si hay posibilidades de trabajar con ellos, ya sea a pequeña o a gran escala. “Lo importante es trabajar y pensar en el futuro”
Al margen de esto, indicó que lo cierto es que España está poniendo toda las cartas sobre la mesa y que está favoreciendo también el desarrollo empresarial en Marruecos porque eso implicaría una menor inmigración a Melilla de personas del país vecino si mejoran las condiciones al otro lado de la frontera.
“Pero sí que merecemos respeto y que se hable de Melilla y se pongan nuestros problemas en las reuniones para ver qué va a pasar con su futuro”, añadió.
El presidente de la Confederación de Empresarios de Melilla (CEME), José Reyes, aseguró que ya hay noticias de Marruecos que hacen referencia a que se quiere acabar con el comercio atípico que hay entre Melilla y las poblaciones cercanas. Confía en que el comercio fronterizo dure otros diez años más porque cree es el periodo que va a tardar el país vecino en desarrollar la zona norte del país y, por lo tanto, de dar trabajo a las miles de personas que ahora dependen de esta actividad de traspaso de mercancías entre ambas fronteras.
Explicó que para pueda cerrar Barrio Chino o Farhana se tendría que contar con ese avance en las zonas cercanas y aún no va a ser inmediato, sino más bien a largo plazo, con la construcción de ese gran puerto y de una refinería. Reyes afirmó que para Marruecos también sería un problema en este momento cerrar Barrio Chino o Farhana por la cantidad de personas que viven del comercio fronterizo. En cuanto a las restricciones que se encuentran las personas que pasan a diario mercancías por Barrio Chino o Farhana, indicó que habría que hacerse esa pregunta por parte de los españoles y ver a qué se debe esa arbitrariedad en la frontera.
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