Los trabajadores de la sucursal que hay en la Plaza de España la retuvieron hasta que llegó la Policía Nacional. La mujer no fue detenida, pero los agentes se incautaron de varios documentos. Los empleados de la sucursal que el Santander tiene en la Plaza de España se convertieron ayer en los protagonistas de la noticia. Sin querer, se comportaron como en una especie de héroes al identificar y retener a una mujer que supuestamente quería estafarles. Esta señora pretendía conseguir una cartilla de una cuenta que decía tener en este banco sin identificarse. Presentó una carta de la entidad, alegando que tenía prisa, quería que le dieran el dinero sin más. Pero los empleados del Santander ya estaban advertidos del ‘modus operandi’ de esta mujer. De hecho, fuentes de esta entidad bancaria explicaron a El Faro que había denuncias contra ella en la Policía Nacional de otros bancos de la ciudad, situados en el Industrial, por intento de estafa a través de este método. Los hechos La mujer llegó al Santander de la Plaza de España antes de las 10:30 horas de ayer. Intentó sacar dinero y, como no lo consiguió, se marchó, explicaron fuentes de la entidad bancaria a El Faro. De hecho, los trabajadores de la sucursal lamentaron no haberla retenido y haber avisado a la Policía Nacional de que trataba sacar dinero con una documentación que, al parecer, no era suya. Sin embargo, a los pocos minutos, volvió a entrar de nuevo en el banco. Fue en ese instante cuando los empleados del Santander comenzaron a hablar con ella y cerraron la puerta para que no pudiera marcharse. No saben qué llevó a esta mujer a entrar de nuevo a la sucursal, pero lo cierto es que su actitud les indicó que era la supuesta estafadora que estaba actuando en Melilla para sacar dinero en los bancos de cuentas de otras personas. Uno de los empleados salió a la calle y paró a un vehículo de la Guardia Civil que justo pasaba por ahí. Los agentes entraron a la sucursal porque la mujer se estaba poniendo muy nerviosa y los trabajadores no sabían ya cómo retenerla en el interior. Los guardias civiles estuvieron en la sucursal hasta que llegó la Policía Nacional, que ha sido la encargada de investigar todas las denuncias que se han interpuesto contra esta señora. No hay detención La Policía Nacional, por su parte, explicó a El Faro que esta mujer es una conocida por los agentes por haber sido detenida en otras ocasiones por robo y estafa. También es ‘famosa’ en las entidades bancarias por intentar, supuestamente, realizar actuaciones fraudulentas en diferentes sucursales de Melilla. Ayer, la patrulla que acudió a la llamada de los empleados del Santander llevó a esta señora a la Jefatura de Policía para su identificación. No se la detuvo. No obstante, los agentes se incautaron de un gran número de documentos que llevaba encima. De hecho, fuentes de la entidad donde trató de operar explicaron a El Faro que llevaba una revista en el bolso y que en su interior había un gran número de papeles que, en principio, serían de otras personas. En este sentido, añadieron que la mujer sustraía cartas de los buzones de bancos que luego utilizaba como justificante para intentar sacar dinero de esas cuentas. Miguel “No quería entrar en el vehículo y los agentes la han metido a la fuerza” “Cuando la han detenido, no quería entrar en el coche de la Policía y los agentes la han tenido que meter a la fuerza”. Así lo aseguró ayer Miguel, el propietario del quiosco de prensa que hay frente al banco Santander de la Plaza de España. Fue testigo en primera fila de la detención de una señora a la que pillaron intentando sacar dinero de una cuenta que no era la suya. Miguel explicó a El Faro que se armó cierto revuelo en los alrededores al ver los coches de Policía y Guardia Civil en el banco. Afirmó que con todas las cosas que suceden en el mundo, los melillenses que pasaban por la calle curioseaban y preguntaban qué había pasado. No obstante, indicó que todo fue muy tranquilo hasta que la mujer se negó a entrar en el vehículo. También destacó que le habían comentado que esta señora es de Melilla, aunque él no la conoce y eso que trata con muchos melillenses a diario por su trabajo.