Las partículas de amianto que existen en la cubierta de la escuela infantil del colegio Real, ubicado en la barriada del mismo nombre, no son suficientes como para entender que pueda existir una situación de riesgo. Así lo ha manifestado este miércoles el director provincial de Educación, Juan Ángel Berbel, quien hacía así referencia a las conclusiones del informe que ha emitido el laboratorio Echevarne, encargado de realizar el correspondiente estudio.
Berbel aseguró que el resultado del recuento indica que los valores están "por debajo del límite inferior" que se consideraría para empezar a tener precacuciones. En definitiva, se trata de que los restos de las partículas de amianto "no son cuantificables", dada la escasa concentración advertida en los estudios técnicos especializados que se han llevado a cabo en las últimas semanas.
El director provincial indicó a ese respecto que la cantidad es tan pequeña que "no hay dispositivo técnico facultado para medirlo". "Por lo tanto, la medición ha sido negativa", insistió Berbel.
En ese sentido, el director provincial del Ministerio de Educación comentó que el contenido de dicho informe se tuvo que dar a conocer este pasado martes en el transcurso de la reunión que mantuvo el Consejo Escolar. De ahí que añadiera la suposición de que "se habrá tranquilizado a la familia o al profesorado que pudiera estar inquieto con esta situación", indicó Berbel.
No es el primer informe con resultado negativo en cuanto al amianto de la cubierta de la escuela infantil del Real. El estudio técnico pedido por la Consejería de Educación, Juventud y Deporte para determinar el grado de exposición de los alumnos y docentes de las aulas a esa sustancia también dio negativo. Es decir, se ha constatado una "ausencia total" de fibras contaminantes, según señaló hace unos días a El Faro el consejero Miguel Ángel Fernández.
En opinión del consejero popular, las conclusiones del informe arroja por tanto "algo de tranquilidad" y desde la Consejería ha mostrado "nuestra satisfacción porque vemos que no está en una situación de descontaminación que pueda afectar al alumnado y el profesorado que imparten clases en esas aulas".
En cualquier caso, lo cierto es que esa cubierta debe ser retirada y de ahí la propuesta de llevar a cabo reuniones conjuntas entre la Consejería y la Dirección Provincial para establecer cómo se podría llevar a cabo y de dónde partiría la financiación de las obras.
"Si es que ellos, por falta de dotación presupuestaria o por algún tipo de condicionamiento procedimental, no pueden acometer esa actuación, que por competencias a ellos se les tiene establecido llevar a cabo, nosotros estamos dispuestos a ayudar", concluyó Fernández.