La bandera azul ondea desde el mediodía de este viernes en cuatro playas melillenses. Este reconocimiento se otorga a las playas que cumplen con parámetros como calidad del agua de baño, información y educación ambiental, gestión ambiental y servicios e instalaciones.
El presidente de la Ciudad, Eduardo de Castro, señala que es un hito y un gran logro este reconocimiento internacional para las playas de Melilla. “Esto no se lo dan a cualquiera, hay que trabajarlo”, afirmó De Castro quien felicitó a los técnicos de Medio Ambiente por la labor realizada.
La obtención de la bandera azul engloba una serie de parámetros, donde se incluye el socorrismo. De Castro afirmó que la organización Bandera Azul ha felicitado a Melilla por ello, “le ha parecido inmejorable”, dijo.
Por su parte José Palacios, presidente de Bandera Azul, felicitó a la ciudad por tener cuatro banderas azules “totalmente merecidas en todos los criterios”, pero también pidió a los ciudadanos y a las formaciones políticas dejar “la política a un lado. La bandera azul es un símbolo internacional presente en 47 países de los cinco continentes”.
Aseveró que les mueve el cumplimiento de criterios de calidad ambiental, seguridad de los ciudadanos y representación de un turismo sostenible.
Asimismo quiso poner en valor la bandera azul, un emblema internacional en el que “nos mueve más la cooperación entre todos para lograr” unas playas de calidad en los criterios que evalúan, explicó Palacios
Tras visitar las playas locales, Palacios animó al Gobierno local a incluir un sendero azul para el 2022 en el que la ciudadanía pueda hacer deporte sano con información turística e histórica; así como también a presentarse en la distinción temática de socorrismo por el trabajo de prevención realizado.
Por su parte el consejero de Medio Ambiente, Hassan Mohatar, informó de que 100 personas trabajan diariamente en el servicio de playas. Han puesto en marcha ocho contratos y más de 1.100.000 euros para que los melillenses disfruten las playas.
Uno de los contratos se refiere al balizamiento, con el que lograron que viniera una embarcación a la ciudad que en cinco días hizo todo el balizamiento de la bahía melillense. Mohatar explicó que con el contrato del Ejecutivo anterior, se hacía con la misma embarcación de la limpiamar que tardaba entre 32 y 35 días.
Mohatar recordó que han puesto 300 sombrillas nuevas y espera para el 2022 cambiarlas todas, además de que se “han puesto baños nuevos y pasarelas nuevas”.
Destacó que por segundo año consecutivo Melilla tiene cuatro banderas azules en seis kilómetros. Es un indicativo, según Mohatar, de la calidad de las playas locales.
Asimismo, Mohatar no dejó de lado los problemas que han tenido con las playas de la zona norte, Horcas Coloradas, Galápagos y Aguadú, “pero que están ahora mismo en perfecto estado y situación para que los ciudadanos puedan disfrutarlo”.
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