Autor: Salvador Ramírez

En dos o tres meses, dice la Ciudad Autónoma, tendremos ese macro toro negro zaíno en las alturas de Cabrerizas. ...

No tengo la menor duda de que hay gente –por ejemplo la multipropiedad de la Casa de los Cristales– que ...

El día en el que los niños de todo el mundo se pongan en pie de guerra, los adultos lo ...

Se llama Mohamed Botassa y es camarero marroquí –orgulloso de ser camarero y orgulloso de ser marroquí– que trabaja en ...

Por lo menos en su pueblo, Ricardo Fernández Sánchez, hijo de Ricardo y María del Carmen, es el uno, el ...

Bueno, son ejemplares, son admirables y hasta tienen tiempo de tomarse un cafetito. Se llevan a las mil maravillas porque ...

Excmo. señor don Ramón Gavilán: Usted me lo perdonará porque usted perdona todo pero déjeme decirle que lo de la ...

El muchacho quería volar. Es de Melilla, quiere a Melilla, se siente cómodo en su Melilla pero deseaba aspirar otros ...

Bueno, el tiempo pasa de forma inexorable, como toda la vida; esto de los tacos del calendario es una maldición ...

Qué hermosa tarde-noche la del viernes. Música sincera, cercana pero trabajada de una forma excelente, hasta el punto de la ...