“Aspanies, en 25 años, pasó de pedir a ofrecer servicios a la comunidad”

La asociación homenajeó ayer, en su aniversario, a la primera Junta Directiva de la entidad.

Hace 25 años tardaban meses en diagnosticar una discapacidad intelectual, negaban la escolarización a niños con retraso madurativo y no había empleos para personas adultas con este perfil ni un centro donde pudieran formarse, al menos, para ser independientes de sus padres. Hace 25 años las familias escondían que uno de sus miembros tenía discapacidad intelectual. Tras muchos años de trabajo y sacrificio, los componentes de Aspanies celebran que su labor continuada desde 1989 ha servido para visibilizar a las personas con discapacidad intelectual, para conseguir más recursos para ellos y para forjar una gran familia entre padres, voluntarios y trabajadores. Así lo aseguró ayer a El Faro el presidente de Aspanies, Carlos Esteban, que destacó que la  asociación durante este tiempo “pasó de pedir a ofrecer servicios a la comunidad melillense”.
La entidad surgió a raíz de una reunión de padres. Hacían falta más ayudas en todos los ámbitos y en un encuentro entre familias se determinó formar una asociación para agruparles y no hacer sus reclamaciones a la Administración de forma individual. Todas esas primeras acciones de Aspanies eran reivindicativas. Había mucho que conseguir para las personas con discapacidad intelectual.
Esteban afirma que el balance de los 25 años es positivo. Si mira atrás, recuerda la historia de un niño que no pudo escolarizarse hasta los 11 años porque no sabía hablar o de otros pequeños que no tenían acceso al centro educativo por las barreras arquitectónicas. Eso ya ha cambiado. Melilla cuenta con centro de educación Especial, Reina Sofía, y todos los colegios e institutos están habilitados para acoger a menores con discapacidad motora.
Tampoco había un centro como el Gámez Morón donde acoger a personas con discapacidad intelectual más grave y que necesita el cuidado de especialistas. Hace 25 años las familias no tenían otra opción que enviar a sus hijos a la península, una situación “terrible” para muchos porque les desvinculaban de sus seres queridos, señaló Esteban.
La formación y la autonomía son dos de las preocupaciones de los familiares de las personas con discapacidad intelectual. Aspanies se ha convertido en un centro donde formar en múltiples facetas a los usuarios. La idea es que puedan ser lo más independientes posible a través de estos cursos. De hecho, uno de los retos de Aspanies es que en Melilla haya un piso tutelado para personas con esta discapacidad.
El empleo en esta ciudad no es sencillo de encontrar, pero si además se cuenta con una discapacidad, es aún más difícil. No obstante, Esteba señala que se ha mejorado, aunque sea a pasos lentos, en este aspecto. Hay empresas grandes que contratan a personas con discapacidad intelectual y también la Administración está ofreciendo plazas en ofertas públicas de empleo para ellas. “Tenemos una visión positiva, pero hay que continuar avanzando y mejorando”, aseveró Esteban.

Un reconocimiento
Pero ayer también fue el día de los reconocimientos. La celebración de los 25 años de Aspanies se llevó a cabo en el hotel Tryp Melilla Puerto. Allí se rindió un homenaje a los que formaron la primera junta directiva de la asociación, los primeros en perder el miedo a reivindicar que la discapacidad intelectual no puede mermar los derechos de las personas que las padecen. Tomás Vadillo (presidente), Elena Jiménez (vicepresidenta), Ali Ahmed Ali (secretario), Manuela Rodríguez (tesorera), María del Carmen Gallardo (vocal), y Pilar Barranco (vocal) fueron los que dieron voz a las familias y personas con discapacidad intelectual.

Un congreso para familias
Al acto asistió un gran número de representantes políticos de la ciudad, la mayoría de los usuarios de Aspanies y los trabajadores y colaboradores.
Además, el presidente de FEAPS, Santiago López, intervino en esta celebración porque esta entidad también cumple años, en concreto 75, con el mismo espíritu de lucha por los derechos de las personas con discapacidad intelectual y de ayuda a las familias que Aspanies. Él fue más reivindicativo y pidió a las autoridades que hagan posible el reto de Aspanies: Un piso tutelado.
Por otro lado, la asociación organiza hoy su VI Congreso de Familias con el objetivo de dar herramientas, facilitar proyectos y contribuir a la mejora de la calidad de vida de los usuarios. Las familias son las principales promotoras de los cambios y de ahí que se les dedique una jornada para la formación y el debate.

Aspanies
Carlos Esteban
El presidente de Aspanies destacó el gran trabajo que han desarrollado a lo largo de estos años las familias de los usuarios de Aspanies. Afirmó que lo que hace grande a la asociación son las personas que forman parte de ella, desde las personas con discapacidad a los voluntarios y los trabajadores.
feaps
Santiago López Noguera
El presidente de FEAPS aseguró ayer que es necesario que Aspanies cuente con la colaboración de la Administración para poner en marcha el piso tutelado que precisan sus usuarios.
Ciudad
Miguel Marín
El presidente accidental afirmó ayer que la sociedad “está en deuda” con Aspanies. Resaltó el gran trabajo que ha desarrollado esta entidad en sus 25 años de vida y recordó cómo fueron aquellos comienzos. Además, se comprometió a que Aspanies siempre cuenta con el apoyo del Gobierno local.
Delegación
Abdelmalik El Barkani
El delegado del Gobierno en Melilla felicitó a Aspanies por este aniversario y aseveró que “está bien” que se utilice este tipo de actos para reivindicar mejoras para sus usuarios.