El terrorista belga fue captado por el cabecilla de la red desarticulada en La Cañada en marzo.
Los terroristas islamistas están cayendo como moscas. Las Policías española y luxemburguesa han detenido en Luxemburgo a un presunto yihadista retornado de la guerra santa en Siria.
Se trata del ciudadano belga Davide De Angelis, alias Abou Nouh, quien, según el Ministerio del Interior, fue reclutado desde Melilla por Mustafa Maya Amaya, el vecino de la Carretera de Hidum número 61 arrestado en marzo pasado en su casa de La Cañada de Hidum acusado de ser el cabecilla de la célula de captación y envío de yihadistas a zonas en coflicto más activa de España.
La Comisaría General de Información del Cuerpo Nacional de Policía y la Unidad Antiterrorista de la Policía luxemburguesa tienen indicios de que De Angelis era uno de los muchos colaboradores que Maya Amaya tenía distribuidos por toda Europa.
Según Interior, De Angelis apoyaba al cabecilla de la red, detenido en La Cañada, en tareas de financiación y captación de nuevos yihadistas, que se incorporaban a las organizaciones Estado Islámico de Irak y Levante en Siria y Al Qaeda del Magreb en Mali para combatir en los conflictos bélicos de ambos países.
De Angelis estuvo en Siria en el año 2012 y desde su regreso de la Yihad comenzó a colaborar con Mustafa Maya Amaya. A raíz de la detención de este último, la Policía abrió varias líneas de investigación para la localización de otros miembros de la red dirigida por el español de origen belga detenido en La Cañada.
Tras varios meses de pesquisas policiales, en colaboración con la Fiscalía de la Audiencia Nacional, Davide De Angelis fue localizado en Luxemburgo. Para ello, agentes españoles de la Comisaría General de Información se tuvieron que trasladar al país europeo para cooperar con sus homólogos luxemburgueses en el arresto del presunto yihadista retornado. Para ello, fue necesaria una orden europea de detención, emitida por el Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional.
En la ‘operación Akteka’
De Angelis ha sido arrestado en el marco de la operación Akteka, acusado de un delito de terrorismo, al ser considerado como un yihadista retornado de la guerra de Siria que facilitaba el envío de combatientes de la red liderada por Mustafa Maya Amaya.
Desde su casa de La Cañada, Mustafa Maya Amaya contactaba a través de Internet con personas asentadas en Europa y el Magreb para captarlos como nuevos yihadistas y enviarlos a Mali y Siria.
La madrugada en la que Maya Amaya fue detenido, los agentes de la Policía Nacional también arrestaron en su casa a dos ciudadanos franceses (Paul Cadic y Farik Cheikh), que supuestamente iban a viajar a Siria.
Ese mismo día se produjeron otras cinco detenciones relacionadas con la red yihadista: Una en Málaga (el tunecino que presuntamente facilitaba pasaportes falsos a los yihadistas) y cuatro marroquíes de la ciudad de Larui (a 30 kilómetros de Melilla).
El Imserso extingue el derecho a servicios o prestaciones de la dependencia a Maya Amaya
El Instituto de Mayores y Servicios Sociales de Melilla ha retirado el derecho a servicios o prestaciones reconocidas de la Ley de Dependencia a Mustafa Maya Amaya, el cabecilla de la célula de captación de yihadistas más activa de España, detenido en su casa de La Cañada en marzo pasado. Así lo publicó ayer el Boletín Oficial de Melilla (BOME).
Según explica la resolución del Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, el Imserso de Melilla ha dictaminado “la extinción del derecho a servicios o prestaciones reconocidas, sin cobro indebido, recaída en el expediente de solicitud de reconocimiento de la situación de Dependencia de Mustafa Maya Amaya”.
Como el Imserso no ha podido notificárselo en el último domicilio conocido, lo publicó ayer en el Boletín Oficial de Melilla.
Maya Amaya ingresó en una prisión de Madrid tras ser arrestado en Melilla en marzo pasado.
El Ministerio de Sanidad ya denegó la ayuda de la Dependencia a Mustafa Maya Amaya en el año 2011 y el presunto reclutador de yihadistas de Melilla, en silla de ruedas, recurrió esta decisión. Según el recurso que él mismo colgó en Internet, su minusvalía le obliga a quedar al cuidado de su mujer, que debe “limpiarlo y darle de comer”, tal y como recogió El Faro.
El texto de la reclamación dirigida al Ministerio de Sanidad y Servicios Sociales lo colgó Maya Amaya en uno de sus muchos blogs de Internet (‘Dormir et dormir’). En él expresa su disconformidad con la resolución del Imserso de Melilla.
El pasado 26 de mayo, la Dirección Territorial del Instituto de Mayores y Servicios Sociales de Melilla volvió a denegar su solicitud, aunque le avisa a través del BOME de que contra esa resolución cabe recurso de alzada ante la Dirección General del Imserso de Madrid. Deberá hacerlo en el plazo de un mes a contar desde hoy.
Mustafa Maya Amaya envió a una veintena de yihadistas a Mali y a una treintena a Siria
El español de origen belga Mustafa Maya Amaya, detenido en marzo pasado en Melilla, envió a una veintena de yihadistas a Mali y a una treintena a Siria, según las investigaciones policiales que maneja el Ministerio del Interior.
El cabecilla de la red de captación de yihadistas más activa de España, hasta que fue desarticulada por la Policía, reclutaba a los combatientes voluntarios a través de Internet, desde su casa de la Carretera de Hidum número 61 de La Cañada.
Para enviar a sus ‘combatientes’ a la guerra santa, Maya Amaya contaba con apoyo financiero y de captación, de yihadistas retornados de la guerra de Siria como, por ejemplo, el belga Davide de Angelis, detenido por las Policías luxemburguesa y española en Luxemburgo, según informó ayer Interior.
“El converso español”, como lo definen fuentes policiales, dirigía la mayor red de captación de yihadistas desde Melilla, aunque se apoyaba en contactos que tenía en Europa y el Magreb.
Tras su detención, el 14 de marzo pasado, se sucedieron múltiples arrestos en Melilla, Marruecos y ahora en Luxemburgo.
La Policía Nacional tiró de los hilos y a raíz de la operación en la que fue arrestado Maya Amaya ha abierto varias líneas de investigación. Una de ellas ha derivado en el ‘caso Akteka’, que se ha saldado con la detención del belga De Angelis en Luxemburgo.
Aún no habían pasado tres meses desde el arresto de Mustafa Maya Amaya en La Cañada de Hidum, cuando la Policía Nacional y la Guardia Civil llevaron a cabo otras seis detenciones de presuntos yihadistas en el mismo barrio melillense de mayoría musulmana dentro de la ‘operación Javer’.
Los seis supuestos terroristas continúan en prisión, aunque según la defensa, ya les han levantado las medidas de aislamiento dictadas por el juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu, que investiga el caso.
Aunque en la ciudad se llegó a rumorear que Mustafa Maya Amaya había quedado en libertad, la detención del belga Davide de Angelis en Luxemburgo y su supuesta relación con Maya Amaya pone en entredicho esta información. Todo indica que las investigaciones policiales se han organizado con un hombre clave en el centro de ellas: Mustafa Maya Amaya.
Desde Interior han destacado que en España se han desarrollado este año cuatro grandes operaciones relacionadas con el yihadismo. Dos de estas redadas han tenido lugar en Melilla (en marzo y mayo) y las otras dos en Madrid y Huelva.
Interior sólo tiene constancia de la existencia de tres presuntos yihadistas retornados en España. Uno de ellos es Benaissa Laghmouchi Baghdadi, detenido el pasado 30 de mayo en La Cañada. Él admite que estuvo 15 días en Mali. El Ministerio le acusa de haber recibido entrenamiento en los campamentos de Al Qaeda en el norte del país.
España es de los países que menos yihadistas envía
El ministro de Interior, Jorge Fernández Díaz, advirtió el pasado 26 de junio de que la amenaza del terrorismo yihadista se ha “agravado”. No obstante, destacó que España es de los países europeos desde donde menos combatientes voluntarios parten hacia zonas de conflicto (sólo decenas) y a donde menos retornan (sólo unidades).
El ministro alertó además de que ningún país está libre de ser objeto de un atentado: “La preocupación es creciente”, dijo. Fernánde Díaz aclaró también que el mayor temor radica en que los combatientes de zonas en conflicto, como Siria o Irak, regresen a los países europeos de los que partieron, “debidamente adoctrinados y preparados para el combate”.
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