Nació en el año 1951 en Melilla. A lo largo de su trayectoria profesional, Antonio Rubio, periodista de investigación, escritor y docente, puede presumir de tener a sus espaldas un trabajo sobresaliente.
Fruto de ello, es que en 2022, fue galardonado con el premio Ondas Globales del Podcast al Mejor Podcast de No Ficción por su podcast 'GAL: El triángulo', en el que Rubio condensa su investigación de casi 40 años de los Grupos Antiterroristas de Liberación (GAL) en ocho episodios. Éste es sólo un ejemplo de los reconocimientos que ha recibido.
En la última Feria del Libro de Madrid, Rubio presentó su reciente obra titulada 'El Desastre de Annual a través de la prensa'. El Faro quiso hablar con él para conocer más detalles sobre su obra, en la que narra el trabajo de la prensa con la censura como enemiga.
“Creo que lo que hacemos los periodistas es recopilar la situación, el momento histórico y ¿cuál es el momento periodístico? Decía un catedrático francés, Joseph Pérez, que el periodista lo que tiene que hacer es recuperar la tempestividad de los elementos y lo que hago en el libro, de alguna manera, es recuperar aquel ayer. El propio Unamuno nos decía que la labor de los periodistas es saber qué ha ocurrido. Hay un dato muy significativo y que en aquella época del Desastre de Annual, año 1921, 1923, aproximadamente, el diario La Libertad llegó a tener una tirada de 230.000 ejemplares, teniendo en cuenta la época a la cual nos referimos, en la que el porcentaje de analfabetos en España era bastante alto y que el transporte, como lo entendemos hoy, no existía”.
Con esta premisa se me viene a la mente la frase de que sin conocer el pasado no podemos entender el presente: “cuando hago algún trabajo periodístico suelo usar el hashtag, mirando atrás, adelante y aquí ocurre el hecho evidente de que el presente de España viene de su pasado y el problema fundamental es que no queremos reconocer su pasado, o no queremos verlo y desde luego todo marca una pauta desde el Desastre de Annual: el auge de Primo de Rivera con la salida de Alfonso XIII, el golpe de Estado de Franco y todo lo demás deriva de aquella época”.
Nunca habría pensado en esto si no llega a ser por Antonio Rubio, pero este acontecimiento, ¿marcó tanto la historia de España?
“Yo no soy un historiador, soy un simple periodista y, fundamentalmente, un periodista de investigación. Todo el hecho de la instalación de la República, el Alzamiento (mal llamado) Nacional es el punto de inflexión y, a partir de ahí, Franco utilizó las tropas creadas en la Guerra del Rif”.
Sobre el papel que jugó el general Francisco Silvestre y su posible denostación a lo largo de la historia, Antonio Rubio subraya que “el general Fernández Silvestre realizó una serie de maniobras que el propio Berenguer criticó y que, posteriormente, en el 'Informe Picasso' se recoge, pero quizás lo más significativo es cuando Alfonso XIII le dice que no siga las órdenes del ministro de la Guerra y que siga adelante. Creo que esa decisión trajo consigo una serie de incongruencias, malas decisiones, prepotencia. Lo más triste fue la muerte de 12.000 soldados españoles por una mala planificación. Como diría mi amigo Ryszard Kapuściński, nosotros somos historiadores del presente, claro, y yo lo que he hecho es coger el presente de aquellos momentos para poder tener una visión de aquel momento porque analizar la historia cien años después no es fácil. Creo que hay que analizar los actos políticos y del poder en su instante”.
Sobre la censura en el Desastre de Annual, Rubio indica que “yo he vivido como periodista la censura en tanto que tengo 73 años y la censura es algo que los poderes dictatoriales intentan aplicar de alguna manera, y lo triste de aquella época era que no se pudiera informar de los hechos que estaban ocurriendo y que fuera el poder el que estableciera la censura. Es triste, pero la realidad es la realidad, pero no creo que hoy en día exista censura”.
Los periodistas echamos la vista atrás y sentimos una envidia sana de aquellos profesionales que vivieron la Transición y momentos claves en nuestro país. Antonio Rubio es más optimista con la visión de esta profesión: “hoy en día se hace un periodismo de investigación tan bueno como el que hicimos en la Transición. Otra cosa es que algunos medios no tengan la independencia económica para publicar algunos temas, pero desde la opción de los periodistas de investigación de los cuales yo soy el presidente de honor, estamos satisfechos de la labor que realizamos. Es más, el próximo 23 de octubre y hasta el día 26 se celebrará, por primera vez, el Congreso de Periodismo de Investigación Iberoamericano y será en Madrid. Creo que, en todo caso, podríamos decir que hacen falta periodistas con más decisión, con más valentía, pero el problema no es la censura sino las noticias falsas que son dos cosas muy diferentes. El problema fundamental son las redes y que la sociedad no se informa. Hay que saber establecer un control de credibilidad y de transparencia de las noticias, pero ésa es una labor de cada ciudadano como tal”.
Y es que Antonio Rubio, y no le falta razón, opina que los periodistas nos hemos acomodado: “creo que, de alguna manera, somos lo que dijo Albert Camus. La prensa es el reflejo de la sociedad en la que vivimos y digamos que tenemos una sociedad más acomodaticia, menos reivindicativa, por llamarlo de alguna manera. Tal vez, la prensa en un reflejo de la sociedad. A veces, determinados programas o determinadas informaciones me infunden mucha tristeza, fundamentalmente en la narrativa. La mala escritura que vemos hoy en los periódicos, pero es lo que vamos a tener”.
Sobre el tratamiento de la prensa en el tema migratorio, Antonio Rubio cree que: “en términos generales lo están abordando de forma correcta y nuevamente hay algunos más apegados a determinados comportamientos políticos y otros a la realidad. La migración es un tema que está ahí desde hace muchísimos años. Los españoles también emigramos y se nos olvida rápidamente. Tenemos que tener en cuenta, además, que vamos a necesitar un número muy importante de migrantes porque, entre otras cuestiones, se precisa mano de obra, y porque para cobrar las pensiones necesitaremos que la gente cotice. Lo que hay que buscar es una alternativa válida para la pobre gente que llega a España y ése es un problema de Estado y tienen que ser los diferentes partidos políticos los que se sienten a solucionar el tema. El problema principal de los partidos, hoy en día, es que no tienen concepto de Estado”.
Sobre el pasado de España que se quiere borrar frente a otros como Alemania o Argentina, conscientes de lo qué ha sucedido en sus países, Rubio es claro: “somos un país sin memoria y un país sin memoria, entre otras cuestiones, porque la Ley de Secretos Oficiales de España data de 1968 cuando existía el dictador Franco y aunque se está trabajando en anteproyectos, hablan de 50 años para revelar un documento. En Europa y EEUU es de 25 años. Un país tiene que conocer su pasado”.
Nos llama la atención que siendo de Melilla y con un libro bajo el brazo sobre el Desastre de Annual no estuviese presente en la Feria del Libro de Melilla.
A nuestro entrevistado parece no sorprenderle tanto: “yo creo que soy un personaje incómodo para unos y para otros, y contar la verdad es incómodo. Lo mismo levanto los GAL que la corrupción del PP”. Antonio Rubio es un periodista de raza e incómodo, o no, tenemos mucho que aprender de él.
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