Las actividades consideradas no esenciales permanecerán paralizadas desde este lunes y hasta el 9 de abril con el fin de reducir aún más la movilidad y el riesgo de infecciones, y tratar de evitar el colapso en las UCI cuando llegue el pico de contagios.
El Gobierno permitirá ir este lunes 30 de marzo a trabajar a empleados que, aunque estén incluidos en los supuestos del permiso retribuido, tengan que realizar tareas necesarias para la interrupción adecuada de la actividad, lo que puede afectar sobre todo algunas industria y la construcción.
Según el real decreto-ley publicado poco antes de la medianoche en el Boletín Oficial del Estado (BOE) que fija este permiso pensado para limitar más la actividad ante la pandemia del coronavirus, en los casos en los que resulte "imposible interrumpir de modo inmediato la actividad" los trabajadores podrán prestar servicios el 30 de marzo.
El único propósito, añade, será "llevar a cabo las tareas imprescindibles para poder hacer efectivo el permiso retribuido recuperable sin perjudicar de manera irremediable o desproporcionada la reanudación de la actividad empresarial".
La medida fue aprobada ayer en un Consejo de Ministros extraordinario que estableció que todos los trabajadores afectados tendrán un permiso retribuido "recuperable", lo que les permitirá recibir su salario "con normalidad" y, cuando pase el periodo de cese de actividad, recuperar las horas "de manera paulatina".
Se exceptúan las actividades ya consideradas esenciales en la declaración de alarma, como sanitarios, fuerzas y cuerpos de seguridad, el sector agroalimentario o el transporte de mercancías.
También se establecen más de una treintena de excepciones que implican que seguirán acudiendo al puesto de trabajo empleados domésticos, repartidores, cajeros de supermercado, la restauración para entrega a domicilio, los que trabajan en centros de mayores o quiosqueros.
El funcionamiento del permiso se asimila a una distribución irregular de la jornada: el trabajador percibirá íntegramente todos los conceptos de su salario aunque permanezca en su domicilio y después tendrá que recuperar todas las horas cobradas y no trabajadas.
En este periodo se mantendrán vigentes todas las obligaciones de empresas y trabajadores de pago de las cuotas y demás conceptos de recaudación conjunta.
Para la recuperación de estas horas, el Gobierno da de plazo hasta el 31 de diciembre y se realizará por acuerdo entre la empresa y los trabajadores, siempre respetando los periodos mínimos de descanso diario y semanal, la jornada máxima anual y los derechos de conciliación de la vida personal, laboral y familiar.