La Asociación de Comerciantes Acsemel presentó ayer dos solicitudes para poder concertar una cita con el delegado del Gobierno, Abdelmalik El Barkani, y otra con el presidente de la Ciudad, Juan José Imbroda, con el objetivo de hablar con estas autoridades sobre un proyecto empresarial. Se trata de la creación de una cooperativa que serviría para distribuir los bultos entre los porteadores y mejorar el control del paso de estas personas por la frontera de Barrio Chino, como ya publicó este periódico la semana pasada.
El secretario de esta entidad, Mohamed Abdelkader, explicó a El Faro que antes de embarcarse en una iniciativa de este tipo desean conocer la opinión de las autoridades melillenses.
Abdelkader indicó que sin el visto bueno de la Delegación del Gobierno y de la Ciudad, no se pueden arriesgar a hacer una gran inversión de dinero para que finalmente este proyecto no sea productivo ni les vayan a dar los permisos para alquilar los terrenos y construir las instalaciones que necesitan en este negocio.
Ayudar a ambos lados
En esta petición de reunión, Acsemel señala que desean crear una “sociedad para ayudar a los ciudadanos de ambos lados de la frontera a través de la cooperación, asesoramiento, colaboración, gestión mediación, vigilancia y mantenimiento del flujo de personas y mercancías, así como de vehículos que transitan por los distintos puntos fronterizos”.
La asociación también destaca en el escrito presentado en el registro único que desean mantener “la mayor y más completa” colaboración con todos los organismos implicados en este tema.
El proyecto
Tras una reunión con la Asociación Unificada de Guardias Civiles (AUGC), se puso sobre la mesa un proyecto empresarial para mejorar el control de los porteadores y de los bultos que pasan por Barrio Chino. La idea es constituir una cooperativa desde la que se gestione la distribución de las mercancías, y de esta forma, ejercer una gestión mayor sobre el comercio atípico para acabar con las avalanchas y otras situaciones problemáticas en la frontera.
La cooperativa se instalaría en unos terrenos frente a este paso fronterizo y sería un establecimiento cerrado. Se encargaría del reparto de las mercancías que se compran en Melilla por parte de comerciantes marroquíes.
De esta forma, todos los porteadores que llevan estos bultos al otro lado de la frontera estarían en el interior de estas dependencias para coger los productos que les hubieran encargado en Marruecos. Es una forma de evitar que haya centenares de ciudadanos en los alrededores de este paso fronterizo con el peligro que entraña al estar la carretera al lado. Los porteadores sólo tendrían que cruzar, entrar en el país vecino y entregar los bultos a su comprador.
La empresa tendrían que contratar a personas para que cogieran todos estos productos que encargan los marroquíes y llevarlas hasta estas dependencias de la cooperativa en Barrio Chino. Desde Acsemel creen que se podrían generar unos 250 puestos de trabajo con esta iniciativa.
El objetivo es que la cooperativa se ‘autofinancie’. Cuando un ciudadano compre mercancía en estos comercios, se le ofrecería la posibilidad de pagar un tasa para que lleven estos bultos hasta la frontera de Barrio Chino. Así, serían los empresarios marroquíes los que pagarían el servicio de esta empresa y la entrega al personal que contraten para pasar estos productos a Marruecos, según explicó la asociación a El Faro.
El sindicato docente ANPE Melilla se une hoy a la conmemoración del Día Internacional de…
“Como cada 25 de noviembre, el PSOE manifiesta su compromiso para la erradicación de la…
La delegación melillense de la Asociación de Policías Motoristas Ángeles Guardianes pasó ayer una tarde de…
Vox Melilla quiere dejar claro su compromiso con garantizar toda la asistencia y apoyo posibles…
El Observatorio de Ceuta y Melilla va a organizar, el próximo día 3 de diciembre,…
El 25N es un día de conmemoración y reivindicación en el que debemos refrendar nuestro…