Las lluvias torrenciales el pasado año provocaron un gran número de daños en toda la ciudad. El centro se inundó y también lo hizo parte de las calles del Industrial y el Paseo Marítimo. Pero estas mismas lluvias también afectaron al muro de una de las escaleras que conectan a los barrios de Calvo Sotelo y el Tesorillo. Se trata de los accesos a la calle Falangista Pérez Osés que ya se pueden utilizar sin problemas por los melillenses.
La Consejería de Infraestructuras anunció este martes la conclusión de los trabajos de rehabilitación del muro y las escaleras que llevan desde la calle General Pintos a la calle Falangista Pérez Osés, y que conecta el barrio de El Tesorillo.
Desde esa dependencia se ha informado que las labores de reparación y rehabilitación se extendieron por 3 semanas y tuvieron que ser ejecutadas ante los daños causados hace dos meses tras las lluvias torrenciales que afectaron la ciudad, y que obligaron a limitar carriles de la calzada por el potencial peligro.
Infraestructuras destaca que el estado de las escaleras, que se encuentran incrustadas entre un muro y un talud a la terminación del barrio de El Tesorillo le fue comunicado por el cuerpo de bomberos, quienes habían llevado a cabo una serie de medidas preventivas.
Las acciones sea acometieron con premura ante la necesidad de evitar cualquier riesgo mayor por los importantes daños, que incluían grietas. Las acciones incluyeron asimismo el establecimiento de una nueva red de saneamiento al inicio del muro con el fin de evitar cualquier peligro de producirse una circunstancia similar.
Entre las acciones ejecutadas sobresale el reforzamiento de prácticamente la totalidad del muro, tanto del talud, como de las escaleras, a fin de que este no suponga un riesgo tanto para los vecinos de la zona como quienes están de paso por esa escalera.
Infraestructuras destaca la satisfacción por haber podido culminar los trabajos en tiempo y forma, aunque lamenta que se tuviera que reducir carriles, decisión tomada ante el riesgo de posible desprendimiento por el estado del muro.
La Dirección General de Obras Públicas, dependiente de la Consejería de Infraestructuras, Urbanismo y Deporte, fue la encargada de acometer los trabajos tras abordar el tema con la Consejería de Medio Ambiente.