La Federación de Asociaciones de Madres y Padres de Alumnos (FAMPA) de Melilla plantea que se estudie la posibilidad de disponer de nuevos grupos en los centros educativos de la ciudad, “con consulta a las familias”, y usar las tardes “si es preciso” para que el número de alumnos en las aulas no sobrepase a lo permitido por ley.
Esta es una de las propuestas que se incluyen en un documento remitido ayer por la entidad tras la reunión urgente mantenida el lunes con las presidencias de las AMPA debida a la situación generada por el proceso extraordinario de escolarización de alumnado de este curso.
En el comunicado, la FAMPA señala que para contar con estos grupos extra, deberían crearse nuevos espacios, como les han informado de que ya se está haciendo en algunos centros.
Desdoblar grupos
En el caso de que se vayan a desdoblar grupos, la entidad pide que se haga lo antes posible la petición al Ministerio de Educación para que provea del personal necesario.
En el comunicado también solicitan que se agilice de manera urgente la finalización de los centros educativos proyectados y “solventar chapuzas como la del Mercado Central, otra herencia, para que se liberen espacios” que ahora mismo se están usando para la educación de adultos y el conservatorio, y que podrían destinarse “a desmasificar y dignificar” la escolaridad en nuestra ciudad, a juicio de la FAMPA.
La federación también solicita a la Ciudad que ceda de manera urgente espacios para albergar aulas provisionales y que se actúe de inmediato frente a “las múltiples carencias” en infraestructuras que deben reformarse. La FAMPA recuerda que el Gobierno local no tiene la responsabilidad de construir centros pero sí de acondicionarlos y alerta del “escaso mantenimiento” de las instalaciones educativas públicas. Para ello, le pide que destine “gran parte de los 15 millones del ‘superávit’ de la Ciudad en 2017” a acometer estas actuaciones.
La entidad explica en el comunicado que “hace meses” demandaron al ministerio y a la Ciudad la creación de una mesa de la que formaran parte el ministerio, y las consejerías de Educación y de Fomento “para priorizar las necesidades de los centros y un reparto de responsabilidades” según cada caso. Piden que estén presentes también las AMPA y creen también de interés que participen las direcciones de los centros y los sindicatos docentes.
En relación con la escolarización extraordinaria, la FAMPA hace una llamada “a la prudencia, al diálogo, a poner datos y soluciones sobre la mesa y a no usar de manera partidista” a los niños.
“Muchas familias e infancia con derecho a escolarización han sido desoídas por la anterior Dirección Provincial”, indican, añadiendo que si alguien considera que se ha cometido un delito, que lo denuncie en los juzgados. Asimismo, recuerdan que la mayoría de las aulas superan la ratio en la ciudad.
Educación inclusiva
“Necesitamos urgentemente una escolaridad inclusiva, equitativa y de calidad como venimos reclamando desde hace demasiado”, apuntan. No obstante, piden que se escolarice, “en condiciones suficientes y lógicas, exclusivamente a quien tenga derecho y que se tomen las medidas oportunas para atender que somos una ciudad fronteriza”, una labor que reconocen que “no es fácil”.
Melilla = Marruecos